¿Cómo desarrollar un espíritu investigativo?

“Il dubbio è la madre dell’invenzione”

Galileo Galilei

Lo que le ha permitido al hombre desarrollarse como civilización ha sido el deseo irrefrenable de responder las preguntas de algunas inquisidoras mentes. Y es por ello, que aquellas personas que se dedican a la investigación alcanzan un gran éxito y prestigio, al mismo tiempo que le hacen un aporte al desarrollo de la sociedad. Si deseas que la tuya se convierta en una de esas mentes curiosas, pon atención a las siguientes palabras.

Lo primero que debes hacer, es preguntarte, preguntarte por aquello que siempre has querido saber. Debes preguntar sin miedo, como lo haría un niño, con curiosidad insaciable. Seguidamente, te darás cuenta que de una pregunta sale otra, y otra más, porque el conocimiento es infinito, tan infinito como lo es la mente humana, como lo es el universo.

Inicialmente tus preguntas se centrarán en tu campo de interés, pero pronto verás que se va extendiendo tu esfera de conocimiento y que desarrollas nuevos intereses.

Pero, ¿dónde hallar las respuestas? Las respuestas están en los libros, en la experiencia de las personas, en los documentales, e incluso en internet, si las sabes buscar. Debes tener en cuenta, que es importante el origen de la información, ya que hay fuentes más válidas que otras, dependiendo de lo que se quiera saber.

Luego de haber desarrollado tu espíritu investigativo, te darás cuenta de la universalidad del conocimiento, de cómo temas muy diversos se relacionan entre sí y en menos de lo que esperas, te será más fácil aprender y enfrentar los desafíos que te presente el conocimiento.

Como ves, te espera un futuro lleno de maravillas por descubrir. ¿Qué esperas? ¡Prepárate!